Un informe de Focus Market muestra que el 29% de los asalariados registrados destinará el aguinaldo directamente al pago de deudas. En medio de la pérdida de poder adquisitivo, millones de argentinos comenzaron a cobrar la segunda cuota del Sueldo Anual Complementario (SAC) de 2025. Y para muchos asalaridados llegó como un auxilio para tapar huecos financieros.
Se trata de un salto del 16% con relación al año pasado, cuando la porción de asalariados que utilizaba el aguinaldo para pagar cuentas era del 13%.
El dato es contundente muestra que el aguinaldo dejó de funcionar como un ingreso “extra” y pasó a ser un salvavidas financiero para sectores medios que todavía sienten la presión del año más ajustado de la última década.
Menos vacaciones
Así como el aguinaldo se comienza a utilizar más para el saneamiento de deudas, también cae la porción de gente que la utiliza para otros rubros discrecionales.
* Vacaciones: caen del 26% al 19%.
* Acciones: bajan del 23% al 19%.
* Compra de dólares: del 16% al 12%.
La tendencia habla de un gasto “conservador y defensivo”. En un escenario donde la inflación bajó y el dólar se mantiene relativamente estable, muchos prefieren no congelar plata ni adelantarse a aumentos que, por ahora, no se aceleran.
Incluso las decisiones típicas de épocas turbulentas desaparecieron del radar como el stockeo en supermercados cayó al 1% y los plazos fijos se mantienen en un escaso 2%. Las urgencias del pasado reciente -llenar el changuito antes de que remarcaran o correr detrás de tasas altísimas- ya no dominan la escena.
